UN EDIFICIO 'ENFERMO'
Edición | fibromialgia.nom.es 06-05-2008
Fuente | El mundo
* La lipoatrafia es una dolencia que elimina las tiras del tejido adiposo
* La enfermedad se da en edificios con exceso de electricidad estática y baja humedad
* El Ayuntamiento ni confirma ni desmiente que el edificio esté ‘enfermo’
Edición | fibromialgia.nom.es 06-05-2008
Fuente | El mundo
* La lipoatrafia es una dolencia que elimina las tiras del tejido adiposo
* La enfermedad se da en edificios con exceso de electricidad estática y baja humedad
* El Ayuntamiento ni confirma ni desmiente que el edificio esté ‘enfermo’
MADRID.- El colmo del trabajador es que el empleo te absorba... literalmente, y que encima el puesto que se desempeñe sea en la Agencia Tributaria. Esto es lo que les ocurre, al menos, a medio centenar de trabajadores municipales, mujeres casi en su totalidad, que desempeñan su labor profesional en este organismo municipal que se encuentra en la calle Sacramento, 3 y 5.
Y es que, desde hace un mes y medio, ven cómo determinadas partes en las que se acumula la grasa de su cuerpo desaparecen. No se trata de nada gracioso, ni de un programa municipal de liposucción. Es lipoatrofia, según denuncia el PSOE y la sección de UGT de la Agencia Tributaria de Madrid.
El sindicato ha denunciado el asunto ante la Inspección de Trabajo, el Comité de Salud de Madrid y el Instituto Regional de Salud y Seguridad en el Trabajo. La cuestión está ya en manos de los técnicos de Madrid Salud (organismo sanitario municipal). El lunes realizaban mediciones en el edificio para precisar si hay deficiencias. Han asumido las riendas de la situación y han puesto al servicio de los poco más de 250 empleados que trabajan en la calle Sacramento un servicio de revisión médica. Hasta la fecha han solicitado el examen medio centenar de personas, ya que creen que están afectadas.
La lipoatrofia es una dolencia poco frecuente, cuya manifestación clínica consiste en la atrofia de una zona semicircular del tejido fino graso subcutáneo, preferentemente en la zona anterior de los muslos; también suele producirse en el estómago y en los brazos.
Suele producirse en edificios a los que se califica de enfermos. Está relacionada, directamente, con las construcciones de oficinas nuevas altamente tecnificadas y los nuevos entornos de trabajo. Está motivada por el efecto de tres posibles exposiciones: campos electromagnéticos, la electricidad estática y una baja humedad relativa ambiental. La falta de una toma de tierra también beneficia su difusión.
No se trata de una enfermedad mortal pero estéticamente es muy visible. Los efectos suelen solventarse una vez que se solucionan los elementos nocivos que lo provocan. Suele afectar, sobre todo, a las mujeres y a las personas que tienen mayor masa adiposa y no es causa de baja. Los sindicatos quieren que sea reconocida como tal.
«En un principio, como soy una persona rellenita, pensé que se trataba de celulitis», precisó una empleada municipal que realiza trabajos de administración que no quiso dar su nombre, «por aquello de lo que pueda pasar».
Cataluña como referente
Hace un mes y medio recibieron un correo electrónico de UGT en el que les informaban del protocolo de actuación de la lipoatrofia semicircular, que ha sido elaborado por Cataluña. «Empezamos a ver que muchos de los síntomas que se describen se ajustaban a las dolencias que padecíamos», precisa. De forma inmediata, ella y otras cinco compañeras, se pusieron en manos de la doctora de riesgos laborales. «Nos dijo que era lipoatrofia y nos remitió a la mutua, a Asepeyo. Allí confirmaron el diagnóstico».
«Es una línea que aparece en los muslos, la tripa o en los brazos. Es como si fuese el muñeco de Michelín», precisa. El pasado día 30 el asunto ya pasó a Madrid Salud. «Nos volvieron a realizar un examen médico en el Instituto Médico Saviola y repitieron las analíticas. En principio, nos dicen que no es peligroso pero lo que me asusta es que yo pido que me pongan eso por escrito y nadie lo hace», aclara. Ella dice que no siente dolor pero que sí nota cierto cansancio de piernas, aunque no sabe si será atribuible a la lipoatrofia.
«Creo que somos unos 20 confirmados y se ha hecho un listado a través de Riesgos Laborables», concreta.
Mario Cardenete, técnico superior en Prevención de Riesgos Laborables de UGT, precisa que hay 12 trabajadores «con diagnóstico médico. No han sido ellos los que han levantado la liebre, aunque sí los que se han movido para solucionarlo. El pasado 1 de abril nos llegó un correo de un trabajador avisándonos y con ello nos pusimos en marcha», precisó. Los números 3 y 5 de la calle Sacramento están unidos y, según aclara, la mayor parte de los casos se han dado en la segunda planta. «Este no es el único ejemplo de edificio enfermo que tiene el Ayuntamiento», por lo que cree que habrá «más casos».
Desde el Ayuntamiento de Madrid, simplemente, le quitan hierro al asunto y prefieren no lanzar las campanas al vuelo. Por el momento, ni confirman ni desmienten nada. «Se está analizando el edificio para saber si hay deficiencias ambientales y en el caso de que existan se corregirán sin más», precisa un portavoz municipal que se resiste a calificar al edificio de enfermo.
El portavoz socialista, David Lucas, dice que al alcalde este asunto no le preocupa y exige una investigación
«La enfermedad no es fatal y los efectos suelen solucionarse en el momento en el que se cambian las condiciones ambientales», asegura cuando previamente había precisado que «no hay ningún caso confirmado de lipoatrofia».
Eso sí, reconoce que hay una lista de casi medio centenar de trabajadores que se han apuntado para que Madrid Salud les haga un examen médico. «En cualquiera de los casos, hay otras enfermedades como la diabetes, que provoca estos efectos. Hay que esperar».
El portavoz municipal socialista, David Lucas, asegura que «no se puede jugar con la salud de los trabajadores del Ayuntamiento, los mismos que sufren dolencias como la lipoatrofia y a los que Gallardón no escucha». A su entender, es necesario que el Consistorio «abra una investigación de inmediato para salir de dudas y para saber si existe una relación directa entre esta dolencia y la situación del edificio, donde parece existir, según los informes de UGT, un nivel excesivo de electricidad estática, entre otras deficiencias, que puede traer más consecuencias. Esperamos que el alcalde no mire para otra parte y adopte las medidas necesarias».
Lucas ya adelantó que el jueves visitará a los trabajadores de la sede de la Agencia Tributaria de la calle Sacramento para «conocer de primera mano la situación en la que desempeñan su labor», sentencio.
El portavoz socialista reprochó al alcalde de Madrid que «sólo» se preocupe de los trabajadores municipales a la hora de externalizar servicios públicos y cree que «debería hacerlo para mejorar sus condiciones laborales».
Y es que, desde hace un mes y medio, ven cómo determinadas partes en las que se acumula la grasa de su cuerpo desaparecen. No se trata de nada gracioso, ni de un programa municipal de liposucción. Es lipoatrofia, según denuncia el PSOE y la sección de UGT de la Agencia Tributaria de Madrid.
El sindicato ha denunciado el asunto ante la Inspección de Trabajo, el Comité de Salud de Madrid y el Instituto Regional de Salud y Seguridad en el Trabajo. La cuestión está ya en manos de los técnicos de Madrid Salud (organismo sanitario municipal). El lunes realizaban mediciones en el edificio para precisar si hay deficiencias. Han asumido las riendas de la situación y han puesto al servicio de los poco más de 250 empleados que trabajan en la calle Sacramento un servicio de revisión médica. Hasta la fecha han solicitado el examen medio centenar de personas, ya que creen que están afectadas.
La lipoatrofia es una dolencia poco frecuente, cuya manifestación clínica consiste en la atrofia de una zona semicircular del tejido fino graso subcutáneo, preferentemente en la zona anterior de los muslos; también suele producirse en el estómago y en los brazos.
Suele producirse en edificios a los que se califica de enfermos. Está relacionada, directamente, con las construcciones de oficinas nuevas altamente tecnificadas y los nuevos entornos de trabajo. Está motivada por el efecto de tres posibles exposiciones: campos electromagnéticos, la electricidad estática y una baja humedad relativa ambiental. La falta de una toma de tierra también beneficia su difusión.
No se trata de una enfermedad mortal pero estéticamente es muy visible. Los efectos suelen solventarse una vez que se solucionan los elementos nocivos que lo provocan. Suele afectar, sobre todo, a las mujeres y a las personas que tienen mayor masa adiposa y no es causa de baja. Los sindicatos quieren que sea reconocida como tal.
«En un principio, como soy una persona rellenita, pensé que se trataba de celulitis», precisó una empleada municipal que realiza trabajos de administración que no quiso dar su nombre, «por aquello de lo que pueda pasar».
Cataluña como referente
Hace un mes y medio recibieron un correo electrónico de UGT en el que les informaban del protocolo de actuación de la lipoatrofia semicircular, que ha sido elaborado por Cataluña. «Empezamos a ver que muchos de los síntomas que se describen se ajustaban a las dolencias que padecíamos», precisa. De forma inmediata, ella y otras cinco compañeras, se pusieron en manos de la doctora de riesgos laborales. «Nos dijo que era lipoatrofia y nos remitió a la mutua, a Asepeyo. Allí confirmaron el diagnóstico».
«Es una línea que aparece en los muslos, la tripa o en los brazos. Es como si fuese el muñeco de Michelín», precisa. El pasado día 30 el asunto ya pasó a Madrid Salud. «Nos volvieron a realizar un examen médico en el Instituto Médico Saviola y repitieron las analíticas. En principio, nos dicen que no es peligroso pero lo que me asusta es que yo pido que me pongan eso por escrito y nadie lo hace», aclara. Ella dice que no siente dolor pero que sí nota cierto cansancio de piernas, aunque no sabe si será atribuible a la lipoatrofia.
«Creo que somos unos 20 confirmados y se ha hecho un listado a través de Riesgos Laborables», concreta.
Mario Cardenete, técnico superior en Prevención de Riesgos Laborables de UGT, precisa que hay 12 trabajadores «con diagnóstico médico. No han sido ellos los que han levantado la liebre, aunque sí los que se han movido para solucionarlo. El pasado 1 de abril nos llegó un correo de un trabajador avisándonos y con ello nos pusimos en marcha», precisó. Los números 3 y 5 de la calle Sacramento están unidos y, según aclara, la mayor parte de los casos se han dado en la segunda planta. «Este no es el único ejemplo de edificio enfermo que tiene el Ayuntamiento», por lo que cree que habrá «más casos».
Desde el Ayuntamiento de Madrid, simplemente, le quitan hierro al asunto y prefieren no lanzar las campanas al vuelo. Por el momento, ni confirman ni desmienten nada. «Se está analizando el edificio para saber si hay deficiencias ambientales y en el caso de que existan se corregirán sin más», precisa un portavoz municipal que se resiste a calificar al edificio de enfermo.
El portavoz socialista, David Lucas, dice que al alcalde este asunto no le preocupa y exige una investigación
«La enfermedad no es fatal y los efectos suelen solucionarse en el momento en el que se cambian las condiciones ambientales», asegura cuando previamente había precisado que «no hay ningún caso confirmado de lipoatrofia».
Eso sí, reconoce que hay una lista de casi medio centenar de trabajadores que se han apuntado para que Madrid Salud les haga un examen médico. «En cualquiera de los casos, hay otras enfermedades como la diabetes, que provoca estos efectos. Hay que esperar».
El portavoz municipal socialista, David Lucas, asegura que «no se puede jugar con la salud de los trabajadores del Ayuntamiento, los mismos que sufren dolencias como la lipoatrofia y a los que Gallardón no escucha». A su entender, es necesario que el Consistorio «abra una investigación de inmediato para salir de dudas y para saber si existe una relación directa entre esta dolencia y la situación del edificio, donde parece existir, según los informes de UGT, un nivel excesivo de electricidad estática, entre otras deficiencias, que puede traer más consecuencias. Esperamos que el alcalde no mire para otra parte y adopte las medidas necesarias».
Lucas ya adelantó que el jueves visitará a los trabajadores de la sede de la Agencia Tributaria de la calle Sacramento para «conocer de primera mano la situación en la que desempeñan su labor», sentencio.
El portavoz socialista reprochó al alcalde de Madrid que «sólo» se preocupe de los trabajadores municipales a la hora de externalizar servicios públicos y cree que «debería hacerlo para mejorar sus condiciones laborales».
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